Y es que siendo hija de la actriz Jane Birkin y del cineasta Jacques Gainsburg todo es más fácil. O directamente deberíamos decir que todo es posible. Más aún, si incluimos en esta lista a Carlota Casiraghi y a Milla Jovovich en la casilla de ``mejores amigas´´ y a Charlotte Gainsburg en la de ``hermanastras´´.
Quizás por estar constantemente rodeada de este tipo de celebrities a Lou Doillon se le ha acusado en mas de una ocasión de aprovecharse de las circunstancias para promocionar su carrera, y demostrable es que con tan solo 6 años ya tuvo su primer enchufe en la película (Kung-Fu Master) en la que interpretaba el papel de hija de la que es su madre biológica.
Acusada también de haber tenido demasiada prisa por vivir, a la escasa edad de 12 años tatuajes y peircings adornaban ya su cuerpo y con tan solo 21 años dio a luz a su primer hijo.
Este ritmo de vida habría podido con el futuro y la adolescencia de cualquier joven nacido en el seno de una familia ``normal´´; pero aun así, tras su maternidad su carrera no decayó y con escasos 24 años ya cedía su imagen a casas del sector de la moda como Mango o Givenchy.
Con 28 años protagonizaba portadas en publicaciones de la talla de Tatler (fotografiada en esta por Terry Richardson) o Playboy.
Pero si hay algo de lo que no nos cabe la menor duda, es de que esta ``it girl´´ destila personalidad y estilo por los cuatro costados o por lo menos eso denota su forma de vestir, toda su trayectoria y esos contratos millonarios como imagen de múltiples firmas de ropa que...justifican esa ``belleza singular´´ que caracteriza a nuestra Lou Doillon, pero no hace más que obligarnos a que nos planteemos una cuestión:
¿¿Dónde quedaron los genes de Jane Birkin??